viernes, 5 de diciembre de 2008

Colin y Chloé

Intento escucharte, pero estoy demasiado lejos, demasiado alto (tú ya me entiendes).
Sé que estarás aquí por la mañana, por eso no debo preocuparme.
Ahora veo que tú también flotas. Los dos flotamos.
Observo como mi cigarro arde. Igual que mi vida. Tan desordenada.
No me digas que estás perdida. Hoy no. No quiero tener esa sensación de ir a la deriva.
Aunque no tengamos nada, nada estará bien.
Mira a mi hermana, no deja de dar vueltas en la otra habitación. Ayer me mintió, me decía que estaba bien. Supongo que ella también está en otro sitio.


Las paredes se llenan de televisores, se cubren de colores.
Lo tengo en la mano y lo llevo a mi boca. Ya sabes, lo que nos hace desaparecer.
No puedo dejar de estremecerme. Es como aquel arrancacorazones que tanto me gustaba usar.
Pero hoy no me digas que estás perdida. Hoy no.
Seguiremos bebiendo vino. Te pondrás mi ropa de nuevo si me mantengo aquí arriba.
No quiero tener esa sensación de ir a la deriva.
Aunque no tengamos nada, nada estará bien.
Mira a mi hermana, no deja de dar vueltas en la otra habitación. Ayer me mintió, me decía que estaba bien. Supongo que ella también está en otro sitio. Muy lejos, allá afuera.



La foto es de Bulle.
La canción de Slowdive.